viernes, 14 de septiembre de 2012

En mi familia desde hace muchos años se tiene como tradición enseñarles a los hijos desde pequeños a cocinar, puesto que la comida representa para nosotros un momento de compañía y unión en el que podemos compartir anécdotas y actividades realizadas durante el día, permitiéndonos así interactuar y conocer cada vez más acerca de nosotros mismos.
Primordialmente aprendemos a cocinar el ajiaco, que es para la mayoría de nosotros el plato más representativo de nuestro origen familiar ya que ha sido cocinado y enseñado desde hace mas de 4 generaciones y siempre se a realizado de la misma manera y para fechas especiales en compañía de hermanos, primos, padres y abuelos compartiendo así un espacio en armonía. Esta receta es común a la que se realiza actualmente, pero lo que se busca es integrar a la familia e identificarnos con un plato especial y agradable para todos nuestros integrantes.
Este tipo de evento que realizamos nos permite sentir la unión familiar y poder compartir momentos agradables y experiencias nuevas, por lo que es importante para nosotros,  la unión familiar es símbolo de una compañía con la que siempre se va a contar y que mejor que compartir momentos especiales juntos.


MARIA ALICIA MENDOZA GUTIERREZ 

No hay comentarios:

Publicar un comentario